Capítulo 20.

I'LL FIND YOU WHEN THE SUN GOES BLACK

-¿Pero por qué nos tenemos que ir ya?- Pregunté preocupara mirando como cargaban todo y lo metían donde podían.
-Pues por que el último sitio donde te han localizado es éste. Ahora que ya no lo llevas van a empezar a rastrear todos los sitios que has visitado para intentar atraparte. Toma, lleva esta caja al coche- Me explicó Zacky mientras terminaba de cerrar una caja de cartón y me la pasaba.
Cuando ya estaba todo listo nos pusimos en marcha. El viaje se hizo muy corto. O por lo menos a mi. Cuando entramos lo explicamos rápidamente todo.
-¿Y a donde se supone que iremos?
Preguntó Sara. Tenía razón. Todos habían empezado a empaquetar cosas y a meter ropa en las mochilas y ni siquiera teníamos lugar al que ir.
-Hay un pueblo cercano. Está totalmente intacto.- Dijo Zacky.
-¿Pero que fumas? Está a dos horas de aquí.- Reprochó Jhonny.
-Que no, tío. Que no te enteras.
-Lo sabré yo que hace nada fuí a hacer las comprobaciones.
Siguieron con su discusión sobre el pueblo. Me acerqué a Lorena.
-¿Sabes de que hablan?- Pregunté.
-Sí. Es un pueblo que está al Oeste. Sun- no se que más.
-Sunnyvale
-Exacto, ¿Lo conoces?
-Es mi pueblo.
Se quedó callada mirándome. Me pasó un brazo en señal de apoyo y se fué. Nos conseguimos organizar en 3 motos y 3 coches. En la primera iba Syn con Grace y llevaba una mochila. En la segunda Zacky con Shadows y cargando una bandolera. En la última íbamos Lorena y yo con mi mochila. En el primer coche iba Rev con muchísima ropa y cajjas con de todo un poco. En el segundo Jhonny con Yolanda, Kurt, Billie, Kevin y Sara, después de muchas réplicas, en las rodillas de Billie. Y en el último cocheGerard con todos los trastos y murmurando cosas en voz baja sobre las negativas de Sara para ir con él en el coche.
Cuando llegamos ya era casi de noche. Las supuestas dos horas se convirtieron en 6. Problemas de señalización según algunos. Cuando bajamos se me encogió el corazón. Un cartel enorme ponía "Wellcome to Sunnyvale". Tragué y entramos en el pueblo.
-Podemos ir a mi casa.
Propuse sin dejar de mirar mis pies mientras caminábamos sin rumbo por las calles. No levanté ni una sola vez la vista. Me sabía el camino de memoria. Esuché algunas aprobaciones. Después de un corto camino llegamos. Era una casa normalita, blanca con el tejado azul. De planta baja, primer piso y un desván. Entramos. Fuimos al comedor. Algunos se tiraron el los sofás suspirando.
-Sólo hay un pequeño problema.- Dije finalmente mientras miraba todas las fotografías.
-Ya verás... - Dijo Gerard tapándose la cara con la mano.
-Es que somos demasiados y sólo hay 4 camas y un sofá.
-Pues entonces es perfecto.- Dijo Yolanda. - Aquí dormimos las chicas.
-¿Y los demás?- Preguntó Kevin mirándola enfadado.- A mi que seais chicas me da lo mismo, no pienso dormir en la calle.
-No hace falta que durmais en la calle, cabeza melón- Reprochó Yolanda.- Anda que no tenéis casas.
-Tiene razón.- Admitió Billie.- Nos iremos a la de al lado.
-Nosotros nos buscaremos otra.- Dijo Rev.
-Yo me iré con ellos.- Dijo Lorena señalando a Rev y los demás.
Se fueron y Yolanda, Sara y yo nos quedamos. Grace se fue con Gerard, Billie, Kurt y Kevin. Estuvimos hablando un rato sobre como íbamos a repartinos las habitaciones.
-Helena, tu puedes irte a tu cuarto.- Dijo Yolanda.
-Sí, ¿pero cuál se queda en el sofá?- Dijo Sara- Yo no.
-Pero si tenem...-Empecé a decir pero siempre me cortaban.
-Yo ya he dicho que me quedaba con el cuarto de sus padres. Haber sido más rápida.
-Pero que...- Intenté decir de nuevo.
-Helena, calla un momento, estamos debatiendo cosas importantes.- Dijo Sara.
Me quedé callada y abrí los ojos. ¿Me estaban mandando callar en mi propia casa? Suspiré y solté un "Buenas noches" Mientras subía las escaleras. Ya se las apañarían cuando se dieran cuenta de que hay un cuarto de invitados.
Llegué al piso superior. Me invadieron los recuerdos. Desde las escaleras se veía la puerta del cuarto de mis padres. Doblé a la derecha, l primera puerta era del cuarto de invitados. Seguí caminando y entré en la habitación del fondo a la izquierda, la otra era el baño. Cuando entré y encendí la luz no pude más. Me derrumbé. Estaba todo como lo había dejado. Encima de la mesa aún estaban los libros de matemáticas y la radio aún estaba en una esquina del suelo. Por al rededor de la guitarra aún estaban las partituras tiradas por el suelo y la cama sin hacer. El armario con la puerta entre abierta por tener que hacer la mochila tan rápido. Miré la foto de la pared. Yo con mis padres en el cañón de Colorado cuando tenía 6 años. Me sequé los ojos. Estoy aquí por algo. Os voy a sacar de Battery City. Aunque me tengan que volver a atrapar. Me tiré en la cama y me quedé rápidamente dormida.
Me desperté cuando el Sol me molestaba el la cama. Estaba en mi cuarto. Todo había sido un sueño, entonces. Oí voces en el piso de abajo. Eran dos chicas. ¿mi madre y una de sus amigas? Me desmotivó siempre que mi madre, a mi edad, fuera la chica popular. Miré la mesa. Los libros de mates, arrg. Bajé las escaleras y fuí a la cocina. No se parecía a la voz de mi madre...
-Buenos di...- Me quedé callada mirándolas. Vale, estaba equivocada. No había sido un sueño. Estaba en Sunnyvale, en mi casa, sí. Pero con los Killjoys, no mis padres.- as...
-Eey- Me saludó Yolanda tendiéndome una taza de café.
-Tu sofá puede ser todo lo sofá cama que quieras pero es muy incómodo.- Dijo Sara frotándose la zona de los riñones.
-Lo se- Di un sorbo- Por eso tenemos habitación de invitados.
-¿¡QUÉ?!- Dijeron las dos a la vez.
-Mec.
- No en serio. ¿Tienes habitación de invitados? ¿Por que no lo dijiste anoche?
-No me dejasteis, quizá (?)
No me dijeron nada. Se limitaron a fulminarme con la mirada. Especialmente Sara. Nos cambiamos de ropa y fuimos a la casa de al lado a la derecha. Desde la puerta se oía una discusión. Entramos sin más. Estaban discutiendo sí pero de una forma un poco patética. Llevaban las guitarras y las baterías del guitar hero y en la pantalla se veían las puntuaciones.
-Torpes.- Dijimos todas. Me acordé de Lorena.
Empezamos a discutir sobre lo torpes que eran y al rato apareció por la puerta Syn con Lorena de la mano.
-Ey, ¿A que vienen esos gritos? Os estamos escuchando a pesar de tener la música a toda leche.- Dijo Lorena.
-Nada.- Dijimos todos a la vez.
-Pues ale, como no teneis nada que hacer, iros a investigar por aquí a ver que pilláis.- Dijo Syn sonriente.
-Si venga, nosotros por ahí y vosotros metidos en casa, ¿Qué se supone que váis a hacer?- Se quejó Billie. Lorena y Syn se miraron y soltaron una risita. Nos volvieron a mirar.
-Cosas nazis.- Se fueron entre risillas.
No nos quedó más remedio que irnos a explorar el pueblo. Entramos en el instituto y fuimos clase por clase. La verdad es que no esperaba que encontrásemos nada allí pero en cambio, el gimnasio, encontramos a una chica.
-¿Profesora?- Pregunté extrañada.
-Oh, Jhonson. ¡Creí que no volvería a ver a nadie hasta el fín de los días!
Era mi profesora de literatura, Christa. La verdad es que nunca le hacia mucho caso pero siempre me aprobaba. Me abrazó llorando y le correspondí.
-Profesora, estos son Sara, Yolanda, Gerard, Kevin, Billie y Kurt.
Se saludaron y vi como ella se ruborizaba al darle dos besos a Kurt. Nos contó ue habia estado sola, pasando de lo que habia en la cocina del instituto.
-Fue horroroso. Vinieron y nos dijeron que nos fuéramos a las furgonetas. Yo iba tranquila, me gustaba la idea de Battery City - Todos hicimos una mueca- Pero cuando los vi correr armados detrás de una chica... Por cierto Jhonson, ¿Cómo están tus padres?
-Eeeh.. Bien... Supongo.
-Me alegro.- Sonrió e intenté devolverle el gesto lo más sincero que pude.
Volvimos a casa. Kurt y Christa iban al final del todo hablando en susurros. Billie y Sara iban tranuilos cogidos de la mano. Yolanda y Kevin, cada vez más juntos riendo y yo al lado de Gerard sin hablar.
-¿Cómo va lo de tu memoria?
-Va.
-Pero no hay nada nuevo, ¿No?
-No.
Fin de la conversación. Volvimos a mi casa. Le dijimos a hrista que habia un sofá cama pero que no era muy cómodo. Cenamos y nos fuimos a dormir muy pronto.
//Narra Yolanda//
Me desperté en mitad de la noche. Tenía mucha sed. Baje las escaleras. Me dirijí a la cocina pero...
-¡Auch!
-¡Perdón, perdón!
Habia chocado con el sofá cama.
-¿Qué haces despierta?
-Iba a por un vaso de agua.
Fuimos a la cocina y empezamos a hablar. Estuvimos casi 2 horas cuando decidimos volver cada una a su cama.
-Por cierto, Yolanda.- Me giré a mirarla.- Paciencia con Kevin, ya verás como todo saldrá bien.
Sonrió mientras se volvía a acostar. Yo volví a mi cuarto. Al dia siguiente me desperté al oir los portazos que venían del piso de abajo.
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Holaaaa! Siento no haber escrito nada este mes x) Pero es que son vacaciones xdd En fín, espero que os guste. Ya sabeis, cualquier duda, Tuenti.

Capítulo 19.

And highways I called home

Mientras se iba acercando la moto, todos los demás fueron saliendo. Por suerte me ahorré la charla incómoda.
La moto se paró y bajó un chico alto, con el pelo negro peinado par arriba, moreno y con muchos tatuajes.
-Me alegro de volver a verte, Syn.
Dijo Gerard dándole un abrazo de esos que se dan los tíos. Nunca los he entendido.
-¿Qué haces tan lejos de Suison City?
-Vengo a por Sakuena. Me temo que el Dr. Death la reclama.
En ese momento salió Lorena. Seria. Supongo que sabía que algún día tendría que irse pero no tan pronto.
-Hola, Syn...- Dijo levantándo la mano.
Sin decir nada más se despidió de los demás. Yo estaba al lado de la moto de ese tal Syn, Yolanda se acercó a mi.
-Aquí cada vez somos menos, ¿No?
-Bueno, sólo se va Lorena.
-Y Grace.
-¿También? Pero por qu...
No me dió tiempo a responder. Syn arracó la moto y salió a unos cuantos metros por delante. Para mí desgracia se me había enganchado la camista a saber donde y arranqué junto a la moto. Yolanda me cogió rápidamente del brazo y al efecto de que casi nos fuimos las dos por delante, Kevin la cogió a ella de la cintura.
-¡PARA LA MOTO!
No se quién lo dijo la verdad. Estaba demasiado ocupada intentando recuperar el aliento.
-Torpe.- Me dijo Lorena.
-No soy torpe.- Dije en tono burlón.
-Helena, admite que le tienes un especial... Imán. Para los desastres.- Dijo sonriendo Kurt. Todos conspirando contra mí. Guay.
-¿Eres Helena Jhonson?- Me preguntó Synister.
-Sí.
-Te he visto en las noticias de Battery City. Decían que estabas enferma.
-Algo así he leído.- Contesté esperando que no volviera a mencionar el artículo.
-Pero... ¿Qué pasó exactamente?
-Pues verás...-Empezó a decir Gerard- A Helena la capturaron durante las destinaciones.
-Y yo tuve que acudir para ayudar.- Apuntó Lorena.
-Pero sólo sacó a Kevin- Dijo Sara- Por lo que ella se quedó más tiempop encerrada.
-Se tomó una pastilla- Siguió Kurt- Y perdió una parte de la memoria.
-Además- Continuó Kevin- Tuvo una discusión con el mismísimo Korse.
-Y por ello- Concluyó Yolanda.- Puede que ahora mismo seamos los más buscados.
Se quedó callado analizando toda la nueva información y finalmente, Synister dijo.
-Vaya... Pues si que eres propensa a los accidentes. Por cierto, ¿Le habéis mirado si lleva un chip?
Todos lo miramos extrañados por lo que supongo que se dió cuenta de que no.
-Según algunos de nuestros infiltrados, a los ciudadanos les ponen chips localizadores. Por si huyen y cosas así. Puede que a ella se lo pusieran.
Todos pensaban y asentían.
-¿Y donde suelen poner los localizadores esos? No tengo ninguna cicatriz...- Decía mientras me pasaba las manos por la tripa en busca de alguna marca.
-En los dientes. Son bastante inteligentes... Bueno, Helena, me parece que tienes que hacerle una visita al dentista.- Sonrió.
-¿Den... Dentista?
-Sí. Vente a Suisun City y te traemos después. No tardaremos más de unas horas.
Tuve que aceptar a regañadientes. Odiaba los dentistas. Me subí con Lorena en una moto mientras que Syn y Grace iban en la otra. Empezamos a conducir a toda velocidad por la carretera.
-Syn, sigue tú. Tenemos que parar un momento.- Dijo ella.
Nos paramos. Bajamos de la moto y Lorena se puso a examinar las ruedas.
-Uff, por un momento creía que la íbamos a perder.
-Anda...
-Por cierto, ¿Ya has hablado a Gerard sobre lo de anoche?
-NO!
-¿Por que?
-Pues por que no. ¿Y tu con Kevin?
-No toco ese tema.- Dijo subiéndose a la moto.
-¿Por qué aquí todos cotilleáis a los demás menos yo?- Encendió la moto y corrí a subirme.- Vale, vale...
Seguimos conduciendo hasta que llegamos a un pueblucho abandonado. Nos paramos justo delante de un edificio de 3 pisos. Había un cartel que ponía "Clínica dental Mr.Shadows" Que nombre tan extraño... Entramos. Un chico tocando la batería con unas baquetas en las mesa estaba en la recepción. Nos vió y dejó su concierto mental.
-Hola, soy James, pero me llaman Rev. ¿Tienen cita?- Sonrió.
-No te hagas el idiota, Rev- Dijo Lorena dándole un abrazo.- Y Syn esta...
-Con la niña arriba. La pobre estaba muerta de sueño.
-Oh, está bien.
-Y tu eres....- Dijo mirándome.
-Helena.
-Creemos que tiene un localizador.
-Oh, vale. Espera... ¡¡ZACKY!!
Un chico alto, con el pelo negro y ojos verdes y también lleno de tatuajes vino a donde nos encontrábamos.
-¿Qué quieres?
-Un café- Sonrió. El otro suspiró y salió por la puerta. The Rev nos miró y sonrió- Lo tenemos de chico de los recados- Rió. No le encontraba la gracia.
Entonces entró otro chico. Alto, con cresta.
-Oh un paciente. Esto es nuevo.... Ahora se lo digo a Shadows. Ven, anda.
Saludó a Lorena y me hizo sentar en una silla de esas que tienen los dentistas. Al poco rato entró un chico con unas pintas que nunca había imaginado. Muy blanco, con los ojos verdes, el pelo corto y negro. Llevaba una camiseta que se leía "Avenged Sevenfold" y una calavera, con la bata blanca desabrochada, unos pantalones de vestir y unas deportivas. Sin palabras. Se acercó a mí y se sentó en su taburete a mi lado.
-¿Qué te trae por aquí... Helena, verdad?
-Sí... Pues que dicen que... Que tengo un... Localizador.
-Hostia.
Puso gesto preocupado. Me quedé blanca.
-¿Es muy malo?
-No. Quito a diario.- Rió.- A ver di "Aaaah"
Abrí la boca tanto como  pude. Empezó a mirarme toda la boca. Sin parar de tocar diente por diente.
-Y cuentame Helena, ¿Cuántos tacos tienes? Déjame adivinar.... ¿16?
¿Cómo quería que le contestase con sus manos en mi boca? Nunca he entendido a los dentistas...
-¡¡Jhonny!! Trae los empastes.
Jhonny los trajo.
-¿Empeastes?
-Sí. No te preocupes, sólo necesitas 5.
-¿¡QUE?!
-Que noooo!- Rió de nuevo- Era coña... Anda, déjame que siga mirando...
Este tío estaba loco. Dr. Shadows... ¿En qué estarían pensando Lorena y Syn al traerme aqui?
-Vale.. Déjame ver... ¿Te anestesio?
Se suponía que eso lo debería de saber él... Me conformé con cerrar los ojos con fuerza y él lo tomó como un sí. Instantes después noté un pinchazo.
Negro negro negro.
-Helena... Helena...
Alguien me movía. Abrí los ojos. Intentaba hablar pero notaba la boca hinchada. El doctor Shadows me miró y mientras se quitaba los guantes dijo.
-Te notarás rara la boca hasta que se te pase del todo la anestesia. Al final te dormimos entera.- Sonrió.
No dije nada. Entonces me di cuenta de que ni Lorena ni Synister estaban en la sala. Me habia reanimado Jhonny. Pero como si me leyesen la memoria, Lorena entró por la puerta.
-Oh ya te has despertado.
-Sí. Vámonos ya.- Dijo The Rev asomándose.
Todos se levantaron y salieron. Lorena me miró y suspiró.
-¿Vas a estar ahí todo el dia? Tenemos que irnos cagando leches. ¡YA!

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Bueno al fín lo termino. Comentar, no seas fantasmas ¬¬ xdd Por cierto, a las que no lo sabéis, los dentistas son los miembros de Avenged Sevenfold jajajaja Lo que hace combinar a Lorena y el aburrimiento.... SEGUIR VUESTROS FICS!

Capítulo Especial. (By: http://www.sakuena.blogspot.com )

And when the lights all went out, we watched our lives on the screen.

ATENCIÓN! CAPÍTULO NO APTO PARA MENORES DE 18 e__é 
 Kurt paró el vídeo cuando seguíamos jugando al "Yo nunca"
-Yo nunca he pensado que Gerard y Helena hacen buena pareja.
-Yo nunca he besado por error.
-Yo nunca he pensado en besar a una persona de aquí.
Los chicos y Lorena parecían todo el rato sinceros pero yo mentí en la del beso y Sara no paraba de mirar a Billie.
//Narra Sara//
-Yo nunca he pensado en besar a nadie de aquí.
Esos labios... 
-Yo nunca he pensado en besar a Billie.
Gerard cogió la botella y bebió después le... ¿Guiñó un ojo? Estiré la mano y con la cabeza gacha bebí.
-Yo nunca he pensado en besar a Sara.- Dijo Helena sonriéndome.
Billie cogió la botella y pegó un traguito.
-Vamos fuera.
Se levantó, cogió mi mano, una botella de vodka y salimos a la noche.
//Narra Lorena//
Miré como Billie y Sara se iban.
-¿Lleváis preservativos?- Grité. Billie me dedicó un truquito de magia con una sonrisa enorme.
Helena llevaba los ojos rojos. Que poco aguante.
-Yo nunca he pensado en besar a Gerard.
Gerard cogió la botella y bebió.
-Egocéntrico...- Susurró Kevin.
Helena miraba al suelo. Tengo que entrar en acción.
//Narra Helena//
-Yo nunca he pensado en besar a Gerard.
Tengo que beber. Aunque él me besó por que me quiere...  Lorena cogió la botella y mirándome bebió. Por mucho dolor de cabeza debía beber. Estiré poco a poco la mano y cuando bebí Gerard sonrió mucho más de lo que había visto en él.
Las imágenes empezaron a pasar rápidamente. Kurt había cogido el mando.
-Esto es aburrido. Si queréis lo podéis ver luego pero ahora Yolanda y yo nos queremos reír. Se miraron y rieron.
//Narra Gerard//
¿Por qué bebió Lorena? La miré. Estaba a mi lado. 
-Explícame lo de beber en mi beso.
-No lo pienses mucho. Funcionó. Ella- señaló a Helena- Bebió.
Se fue hacia la pared.
//Narra Kevin//
¿Por qué no me acuerdo de nada? Intenté pensar pero me dolía la cabeza. Si en el "Yo nunca" no he bebido casi. Tengo más aguante. Un cambio en el vídeo. Gerard y Helena se besaban. ¿Irían borrachos?
El vídeo se paró. Me lancé sobre Kurt y le quité el mando.
-¡TODOS FUERA!- Chillé- Menos Lorena, Gerard y Helena.
//Narra Billie//
Kevin nos obligó a salir, mejor, así podría estar con Sara. Nos metimos en el bar y desayunamos juntos. Al contrario que ellos, yo SÍ que recordaba mi noche. Besos bajo la luz de la Luna, caricias...
--> Noche de Gerard y Helena <--
Nos quedamos en la caseta y Kevin puso el vídeo por donde se había parado.
Gerard tumbado encima de mí. Nos besamos una y otra vez como si esa fuera la última vez que pasáramos juntos. Le quería. Quizá no me acordaba de lo que habíamos vivido antes pero los recuerdos se podían volver a formar.
-Helena.- Me miró a los ojos.- Te quiero.
-Vale pero levanta. Me estás aplastando.
Se sentó detrás de mí acariciándome el pelo.Después fue pasando sus dedos mechón por mechón.
-Mmm...
Al oírme observé que aquel ya no era el sonido que emite alguien que se está relajando. Sentí como sus frías manos apartaban el pelo y noté su boca en la nuca. Fue desplazando sus labios hasta mi oreja, y atrapó el lóbulo entre sus dientes. Sentí su lengua por dentro. Me rodeó entre sus brazos cruzándolos sobre mi pecho y tiró de mi hacia él. Me elevó con facilidad. Me puso sobre su regazo, de cara a él, con una pierna calada a cada lado de su cuerpo. Le abracé y me acerqué un poco para besarlo.
Y ya no paramos. Se levantó con mi cuerpo rodeando el suyo.
-¿Donde?- Preguntó.
Le señalé el sofá. Me llevó tal y como estaba y me dejó sobre el sofá. A la luz de la Luna lo vi desvestirse rápida y hábilmente. De un sólo tirón me quité la camiseta y los pantalones y los tiré al suelo. Me quedé mirándolo. Nunca en toda mi vida había visto nada tan hermoso.
-Gerard...- Se colocó junto a mi.- No quiero decepcionarte...
-Eso es imposible.
-No se mucho...
-No te preocupes. Yo sí.
Sus manos empezaron a acariciarme tocándome en lugares en los que jamás me habían tocado.
-¿Ahora?- Pregunté con voz temblorosa.
-Sí- contestó y se puso encima de mí.
Un instante después descubrí hasta que punto era inexperta.
-Deberías habérmelo dicho.
-Por favor no pares.
-No tengo ninguna intención de parar.- Afirmó con gesto serio.- Helena, te va a doler...
A modo respuesta elevé las caderas. Gimió algo y empujó. Contuve la respiración. Me mordí el labio. Gimió y se agitó bruscamente. Empezó a moverse con una especie de frenesí que me dejó aturdida. Luego poco a poco comencé a entender y adecuare al ritmo. Le excitó mucho mi respuesta e intuí que algo estaba a punto de pasar.
-Gerard por favor...- Jadeé y le clavé las uñas en las caderas. Entonces un leve cambio de postura le permitió juntarse aún más contra mi. Y antes de poder evitarlo estaba volando. Noté el roce de sus dientes en mi cuello y dije- Si...- Fue muy excitante y se corrió dentro de mi.
--> Noche de Lorena y Kevin <--
//Narra Lorena//
Cuando llegamos al sofá Gerard y Helena ya se habían ido. Era todo para nosotros. Kevin hizo que mi cuerpo se incendiara cuando me tocó inundando de cálida humedad mi sexo. Me apreté a él intentando acercarme tanto como fuera posible. Cada rincón de mi cuerpo ansiaba sentir el de Kevin pero la ropa nos lo impedía. Afortunadamente Kevin pareció sentir lo mismo pues empezó a tirar de mi ropa. Sus dedos se recrearon sobre la piel de mi estómago y luego se doblaron en mi pecho a través de la seda del sostén. Sin embargo esto no fué suficiente. Volví a cubrir mi boca con sus labios. Mientras empezaba a a desabrocharme el sostén. Para mi alivio cayó a los pocos segundos. Me estremecí cuando sus cálidas manos se cerraron sobre mis pezones erectos y ávidos. Los besos se hicieron apremiantes mientras tocaba mis pechos. Un instante después estaba sin aliento. Excitada  a más no poder. Empecé a desabotonarle la camisa. Quería sentir todo su cuerpo. Cuando tuve problemas con los botones dejó de acariciarme para ayudarme. Me besó una vez más antes de separarse para bajarme el pantalón hasta las rodillas. Luego perdió la paciencia y me sentó sobre la encimera. Apenas me había sentado me quitó los pantalones y se metió entre mis piernas para volver a besarme. Le di un fuerte mordisco en el labio inferior mientras buscaba juntar nuestros cuerpos. Y el bulto de su pantalón se apretaba contra mí a través de los vaqueros. Me levantó de la encimera para llevarme al sofá y me agarró con fuerza de las rodillas y me abría las piernas . Luego empezó a trazar surcos de besos en uno de mis muslos. Conscientes de que no estábamos solos en la casa cogí un cojín y lo mordí cuando sus labios y lengua rozaron mi ser. Empecé a gritar contra el cojín mientras el orgasmo hacía que todo mi cuerpo se sacudiera. Kevin se enderezó y se quitó los pantalones. Se metió dentro de mi sin más rodeos. Tuve la certeza de que no despertaría mi interés por esto después del aperitivo. Pero estaba equivocada. Solo fueron necesarias un par de sacudidas para que mi cuerpo cobrara interés. Esta vez él alcanzó el orgasmo conmigo. Nos sentamos en el respaldo del sofá.
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Holaaa! Bueno pues aquí estamos las dos flipadas escribiendo esto que nos ha llevado... A ver... Oño! dos horas .-. En fín, espero que os haya gustado e__é De parte de Lorena "No os toquéis mucho n.n" xD

Ale, cualquier duda, a alguna de las dos!